Este hadiz menciona que la religión del Islam está comprendida por deberes, prohibiciones, límites y también asuntos sin legislar.
Ibn As Sam'áni dijo: "Quién obre según este hadiz obtendrá su recompensa y estará a salvo del castigo, pues quien cumple con los deberes, se aparta de las prohibiciones, no transgrede los límites y no indaga acerca de lo que no ha sido legislado; respeta los principios de la religión".
Los deberes son las obligaciones que Allah prescribió a Sus siervos y les impuso realizar, como el saláh, el zakáh, el ayuno de Ramadán y el hayy.
Las prohibiciones son aquellos actos que Allah ha vedado, condenando a quienes los cometan. Las prohibiciones determinantes han sido mencionadas en el Sagrado Corán y la Sunnah.
Allah dice: (Diles: Venid que os informaré lo que vuestro Señor os ha prohibido: No debéis asociarle nada, y seréis benevolentes con vuestros padres, no mataréis a vuestros hijos por temor a la pobreza, Nosotros nos encargamos de vuestro sustento y el de ellos, no debéis acercaros al pecado, tanto en público como en privado, y no mataréis a nadie que Allah prohibió matar, salvo que sea con justo derecho. Esto es lo que os ha ordenado para que razonéis. No os apropiaréis de los bienes del huérfano si no es para su propio beneficio [del huérfano] hasta que alcance la madurez; mediréis y pesaréis con equidad. No imponemos a nadie una carga mayor de la que puede soportar. Cuando habléis [para declarar o decir algo] deberéis ser justos, aunque se trate en contra de un pariente, y cumpliréis vuestro compromiso con Allah. Esto es lo que os ha ordenado para que recapacitéis.) (6: 151-152) (Diles: Mi Señor ha prohibido las obscenidades, tanto en público como en privado, los pecados, la opresión, la idolatría y decir acerca de Él lo que ignoráis.) (7:33)
Existen versículos coránicos en los que se mencionan las distintas prohibiciones referidas a la alimentación. Allah dice: (Di: No encuentro en lo que me ha sido revelado otra cosa que se prohíba comer salvo la carne del animal muerto por causa natural, la sangre derramada, la carne de cerdo porque es una inmundicia vedada, y la carne de todo animal que por desvío haya sido sacrificado invocando otro nombre que no sea el de Allah...) (6:145) (Se os ha prohibido [beneficiaros de] la carne del animal muerto por causa natural, la sangre, la carne de cerdo, la de todo animal que haya sido sacrificado invocando otro nombre que no sea el de Allah; la del animal muerto por asfixia, golpes, caída, cornada o matado por las fieras, a menos que haya sido herido por ellas y alcancéis a degollarlo [antes de que muera]; la del que ha sido inmolado en altares [para los ídolos]. Y [se os ha prohibido también] consultar la suerte valiéndoos de flechas, porque todo esto es un desvío...) (5:3)
Versículos en los que encontramos las prohibiciones referidas al matrimonio:
Allah dice: (Se os ha vedado contraer matrimonio con vuestras madres, vuestras hijas, vuestras hermanas, vuestras tías paternas y maternas, vuestras sobrinas por parte de hermano o de hermana, vuestras madres de leche, vuestras hermanas de leche, las madres de vuestras mujeres, vuestras hijastras que están bajo vuestra tutela nacidas de esposas con las que habéis consumado el matrimonio, pero si no habéis consumado el matrimonio no incurrís en falta en casaros con ellas; también han sido vedadas las esposas de vuestros propios hijos, así como casaros con dos hermanas a la vez, salvo que lo hubiereis hecho antes de esta prescripción. Allah es Absolvedor, Misericordioso.) (4:23)
Entre los versículos destinados a transmitir las diferentes prohibiciones en el campo de las transacciones comerciales encontramos los siguientes:
Allah dice: (Allah permitió el comercio y prohibió la usura...) (2:275)
También una prohibición puede ser deducida de una advertencia severa, como en el siguiente versículo coránico: (¡Oh, creyentes! El vino, los juegos de azar, los altares [sobre los cuales eran degollados los animales como ofrenda para los ídolos] y consultar la suerte valiéndoos de flechas son una obra inmunda de Satanás. Absteneos de ello y así tendréis éxito. Satanás sólo pretende sembrar entre vosotros la enemistad y el odio valiéndose del vino y de los juegos de azar, y apartaros del recuerdo de Allah y la oración. ¿Acaso no vais a absteneros?) (5:90-91)
Los límites que Allah ha establecido y prohibido transgredir comprenden el conjunto de acciones lícitas, sean éstas obligatorias, recomendadas o simplemente permitidas. Transgredirlos significa ir más allá de estas prescripciones e incurrir en los actos prohibidos.
Allah dice: (Éstas son las leyes de Allah, y quien quebrante las leyes de Allah habrá sido injusto consigo mismo...) (65: 1) (Estos son los dictámenes de Allah. Quien obedezca a Allah y a Su Mensajero, Él le introducirá en jardines donde corren los ríos, y donde vivirán eternamente. Éste es el éxito grandioso. Pero quien desobedezca a Allah y a Su Mensajero y no cumpla con Sus dictámenes, Él le introducirá en el Fuego donde permanecerá eternamente y sufrirá un castigo humillante.) (4:13-14)
Narró An Nauuás Ibn Sam'an que el Profeta dijo: "Allah expuso el ejemplo de un sendero recto que tiene en cada uno de sus costados una pared en la que hay puertas abiertas y de las que cuelgan cortinas. En la entrada hay un pregonero que proclama diciendo: ¡Oh, gente! Ingresad todos a este sendero y no os desviéis, y en el medio del sendero hay otro pregonero que cada vez que alguien intenta abrir una de las cortinas exclama: ¡Ten cuidado! No la abras, pues si lo haces terminarás ingresando. El sendero es el Islam; las paredes a ambos lados son los límites establecidos por Allah; las puertas abiertas son las prohibiciones; el pregonero que se encuentra en la entrada es el Libro de Allah, y el que se encuentra en el medio del sendero es la conciencia que existe en el corazón de cada musulmán".[2]
Los asuntos que no han sido legislados son aquellos que no han sido calificados como lícitos, obligatorios o prohibidos. Por ende, quien incurre en ellos no debe ser censurado, pues esto es una misericordia de Allah para con Sus siervos.
Sólo la Shari'ah puede decidir si una determinada acción es obligatoria o ilícita, y nadie tiene autoridad para legislar lo que ésta ha obviado. El siguiente hadiz es una prueba de que quien incurre en alguno de los asuntos que no han sido legislados, no debe ser censurado.
El Profeta dijo: "No me indaguéis por aquellos asuntos que no os he legislado, pues ciertamente quienes os precedieron fueron destruidos a causa de sus constantes indagaciones y su discrepancia con los profetas que le fueron enviados. Por ello, si os prohíbo algo, alejaos de él, y si os lo ordeno, hacedlo en la medida que podáis".[3]
El Profeta dijo esto luego de que uno de sus Compañeros le preguntara si era obligación realizar el hayy todos los años.
Allah menciona este principio en el Sagrado Corán: (¿Por qué no habríais de comer de lo que [al momento de su degüello] se ha mencionado el nombre de Allah, cuando Él ya os ha detallado lo que os está prohibido [comer], salvo en caso de extrema necesidad?) (6: 119)
En este versículo, Allah reprende a los musulmanes por negarse a comer lo que Él no ha prohibido, es decir la carne del animal sacrificado en nombre de Allah, pues Él ha dejado bien en claro qué clase de alimentos está prohibido ingerir, y éste no se encuentra entre ellos.
Allah ha dejado asuntos sin legislar por misericordia hacia los musulmanes. Él no los ha calificado como obligaciones para no castigar a quienes no los realicen; ni tampoco como prohibiciones para no castigar a quienes incurran en ellos. Estos asuntos han quedado sin legislar por misericordia y no porque Allah se haya olvidado de clasificarlos, pues Él está exento de cualquier imperfección. Allah dice: (Mi Señor no se equivoca nunca ni se olvida de nada) (20:52)
El Profeta ordenó a los musulmanes no indagar demasiado a cerca de estos asuntos con el mero fin de cerciorarse de su licitud o prohibición; a excepción de los sabios, pues ellos pueden indagar para hacer sus deducciones y dictaminar su alcance legal.