Islam A Distancia

Yaber (que Dios esté complacido de él) narró: El Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) tenía la costumbre de quedarse rezagado de los demás durante los viajes. Pues conducía a los animales débiles y llevaba en su montura a quien no tenía montura y, suplicaba a Dios por ellos.

Ibn U'mar (que Dios esté complacido con ambos) narró: Cuando el profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) regresaba de realizar la peregrinación o el U'mra y atravesaba algún desfiladero o una dura cuesta, proclamaba por tres veces: "¡Dios es el Supremo!" Luego añadía: No hay otra divinidad salvo Dios, Es Único y sin copartícipe alguno. Suyo es el Reino y suyas son las alabanzas...

Jawla Bint Hakim (que Dios esté complacido de ella) narró: He oído al Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) que decía: Quien llegara a un lugar y dijera: "Me refugio en las Palabras Integras de Dios contra el mal de aquello que Él ha creado". Nada le perjudicará hasta que abandone aquel lugar".

Anas (que Dios esté complacido de él) narró: cuando el Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) regresaba de algún viaje, tenía como costumbre no entrar en casa de noche, y siempre lo hacía por la mañana o por la tarde.

Abu Huraira (que Dios esté complacido de él) narró que el Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: "No le es lícito, a una mujer que tenga fe en Dios y en el Ultimo Día, viajar sola durante un día y una noche salvo que está acompañada por un familiar, cuyo parentesco le impide casarse con ella".

Abu Musa (que Dios esté complacido de él) narró que el Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: "Preservad el Sagrado Corán en vuestros corazones, así como su recitación y memorización. ¡Juro por Quien tiene el alma de Muhammad en Su mano! Que el Corán es más difícil de conservar en la memoria que el retener atados a los camellos".