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EL PASO HACIA EL PARAÍSO: Prohibición De Dibujar Animales Sobre Alfombras, Piedras, Ropa, Moneda, Paredes, Cortinas, Etc. Y La Orden De Destruirlos

EL PASO HACIA EL PARAÍSO
Dichos De Muhammad El Enviado De Dios
El-Imam Al-Nawawi
CAPÍTULO 253
Prohibición De Dibujar Animales Sobre Alfombras, Piedras, Ropa, Moneda, Paredes, Cortinas, Etc. Y La Orden De Destruirlos

EL LIBRO DE LAS CUESTIONES PROHIBIDAS

947. A'icha (que Dios esté com­placido de ella) narró: En cierta ocasión, coloqué una cortina con figuras en uno de los ventanales de mi casa. Por aquellos días, el Envi­ado de Dios (la paz y las bendi­ciones de Dios sean con él) se en­contraba de viaje. Al regresar, vio la cortina con sus figuras, y mostró su disgusto diciéndome: "¡A'icha! Los que tendrán mayor castigo en el Ultimo Día, serán los que rivali­zan con Dios en la creación".
Así que hemos cortado aquella cortina e hicimos de ella uno o dos cojines.

948. Ibn A'bbás (que Dios esté complacido de ambos) narró que había oído al Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) decir: "Los forjadores de imágenes estarán en el Fuego. Por cada imagen que uno de ellos haya hecho en vida, habrá un alma, y el forjador sufrirá en el Infierno por cada una de estas almas".
Ibn A'bbás añadió: Si tienes que esculpir, pues esculpe árboles y todo lo que no tenga alma.

949. Ibn A'bbás (que Dios esté complacido de ambos) narró que había oído al Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) decir: "Quien hiciera imágenes en esta vida, se le exi­girá, en el Ultimo Día, que sople en la misma un alma pero no podrá soplarla.

950. A’icha (que Dios esté complacido de ella) narró que el Envia­do de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) se había cita­do, a una hora determinada, con el Arcángel Gabriel pero éste no acudió.
El Profeta (la paz y las bendi­ciones de Dios sean con él) que llevaba un bastón en la mano, lo soltó diciendo: ¡Dios no falta a Su pro­mesa ni desmiente a Sus Enviados!".
Luego, al volver la mirada, vio a un cachorro que se encontraba de­bajo de su cama y, por ello, pre­guntó: ¿Cuándo entró aquí este perro?.
Dije: ¡Por Dios! No me di cuenta de ello.
Acto seguido, ordenó que se le sa­cara. Entonces llegó el Arcángel Gabriel (la paz sea con él) y el En­viado de Dios (la paz y las bendi­ciones de Dios sean con él) le dijo: "Me prometiste venir, así que te esperé pero no viniste"
Respondió: "Me lo impidió el per­ro que tenías en casa, pues noso­tros (los ángeles) no entramos en las casas en donde se encuentren perros o imágenes”.

Selección y Prologo: Prof. Dr. M.M Al-Azami
Traducción de texto: Ahmed M. Safi
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