La Verdadera Musulmana No Viaja A Menos Que Sea Con Un Mahram
Uno de los mandatos del Islam con relación a las mujeres, es que ella no debe viajar sin un acompañante mahram, pues su viaje está lleno de peligros y penurias, y no es correcto para una mujer encarar esta situación a solas, sin un mahram que la proteja y la cuide. Por eso, el Profeta prohibió a las mujeres viajar a solas, sin la compañía de un mahram. Esto está registrado en numerosos Ahâdîz, pero será suficiente citar solamente dos de ellos aquí: "Una mujer no debe viajar por más de tres días, a menos que lo haga con un mahram".[1]
"A una mujer que cree en Allah y en el Ultimo Día no le está permitido viajar la distancia de tres días, de travesía, sin un mahram".[2]
Todos los Ahâdîz sobre este tema manifiestan que la presencia de un mahram es la condición para el viaje de las mujeres, excepto en casos de absoluta necesidad como lo definieron los eruditos, cuyos puntos de vista difieren muy poco.[3]
De esta forma, la musulmana es una fiel obediente a Allah , al seguir sus mandatos, acatar Sus prohibiciones y aceptar Sus regulaciones. Así, se adhiere a las enseñanzas del Islam y soporta con paciencia cualquier dificultad en la que se vea involucrada, obedeciendo a Allah aunque sea en contra de varias de las ideas sociales prevalecientes. Ella está llena de esperanza de que finalmente triunfará y saldrá victoriosa, como lo manifiesta el Corán:
[Juro por el transcurso del tiempo que ciertamente los hombres están perdidos, salvo aquellos que crean, obren rectamente, se aconsejan mutuamente cumplir cabalmente [con los preceptos divinos] y ser pacientes y perseverantes.] (103:1-3)